Oficinas Five Norte
Autor: INDARQ. Arq. Jorge Visconte - Arq. Osvaldo Lombardo.Sitio Web: https://www.instagram.com/indarquitectura/Profesión: Arquitecto/aProyectista: INDARQCliente: NNColaboradores: Arq. Sol Cáceres. Arq. Patricia Ramírez. Arq. Noelia Ibarra. Arq. Juan LezcanoConstrucción a cargo: INDARQCiudad/Departamento: Fernando de la Mora, ParaguayIdea / Resumen: Fotografía: Leonardo Méndez
El oeste y un único material, el ladrillo formando unos pliegues en conjunto, cómo respuesta a la incidencia del Sol. Sin “puertas” ni “ventanas” cómo expresión de sobriedad e introspección, despegado del suelo para no interrumpir la vegetación rastrera.
Con estas premisas se avanzó para refuncionalizar y adecuar a un uso de oficinas, una obra pre-existente. El elemento vivo y dinámico de la arquitectura, la luz natural, penetra todos los espacios del proyecto, dibujando una matriz, una proyección del ladrillo convocó que recorre pisos y paredes.
Al no poder exhibir el interior de los espacios, por la naturaleza de sus actividades, hemos considerado que el exterior esté exhibido al interior. Con el mismo grado que tamizamos la luz, filtramos la visual desde el exterior. En el interior esto permite, no solo observar el exterior a través de una filigrana cerámica, sino que también percibir constantemente el paso del tiempo según los patrones que las sombras dibujan en su interior.
Jorge Visconte
El oeste y un único material, el ladrillo formando unos pliegues en conjunto, cómo respuesta a la incidencia del Sol. Sin “puertas” ni “ventanas” cómo expresión de sobriedad e introspección, despegado del suelo para no interrumpir la vegetación rastrera.
Con estas premisas se avanzó para refuncionalizar y adecuar a un uso de oficinas, una obra pre-existente. El elemento vivo y dinámico de la arquitectura, la luz natural, penetra todos los espacios del proyecto, dibujando una matriz, una proyección del ladrillo convocó que recorre pisos y paredes.
Al no poder exhibir el interior de los espacios, por la naturaleza de sus actividades, hemos considerado que el exterior esté exhibido al interior. Con el mismo grado que tamizamos la luz, filtramos la visual desde el exterior. En el interior esto permite, no solo observar el exterior a través de una filigrana cerámica, sino que también percibir constantemente el paso del tiempo según los patrones que las sombras dibujan en su interior.
Jorge Visconte